25.12.08

Más arqueología

Como ya he mencionado en ocasiones anteriores el patrimonio arqueológico cordobés es prodigioso. Y no solo en la capital.

En la provincia son abundantes los yacimientos de importancia, valiosos además por su variedad (prehistóricos, romanos, medievales…)

Afortunadamente los ayuntamientos de varias localidades con este tipo de restos han comenzado a considerar su valor y prestarles la atención que merecen. Como patrimonio cultural pero también como recurso económico de futuro.

Uno de los primeros en prestarles atención fue el de Almedinilla, cuyas actuaciones han logrado convertir la localidad en referencia obligada para el cada vez más frecuente turismo “arqueológico” (cultural), gracias a la villa romana de El Ruedo, pero también al ibérico Cerro de la Cruz y al estupendo museo arqueo-etnográfico.

Más recientemente Lucena ha puesto en valor la basílica de Coracho, una interesante iglesia paleocristiana-bizantino-visigoda, aparecida durante las obras de construcción de la A-45, que junto a la cueva del Ángel y otros yacimientos locales pueden convertir a esta ciudad industrial también en destacado destino turístico.

Con un presupuesto lógicamente más reducido, el ayuntamiento de Doña Mencía está luchando a favor de su riqueza arqueológica como ya dijimos en la anterior entrada.

A través de un suplemento especial del diario CÓRDOBA del 20 de junio de este año nos enteramos de que Baena pondrá en marcha el “Plan Baniana”, que tiene entre sus fines el atraer turismo. La creación del Museo de Arte Ibérico y una importante intervención en Torreparedones son dos de los objetivos de este plan.

Tenemos noticias de que será igualmente destacada la actuación del ayuntamiento de Priego en su Museo Arqueológico y de varias iniciativas en el mismo sentido por parte de los de Cabra y Carcabuey.

Mientras tanto en la capital ha aparecido recientemente un extensísimo yacimiento en la avenida de Libia, en el extremo opuesto al también dilatado que apareció en Poniente y estamos a la espera de lo que aparecerá en la Ronda del Marrubial.

Pero es que cerca del límite de la provincia, en los alrededores de los magníficos dólmenes de Antequera, se va a crear el Museo Nacional de Prehistoria…

Lo dicho: oro pétreo en Córdoba y Andalucía. Ojalá las instituciones y otros agentes económicos no lo dilapiden.

2 comentarios:

Jerónimo Sánchez dijo...

Magnífoco post, Rafa...y ojalá los ciudadanos acaben por darse cuenta de que la Arqueología y el Patrimonio Histórico no son problemas, sino oportunidades de desarrollo, tanto cultural como educativo y económico. Todavía hay mucho animal por ahí suelto que sólo ve el progreso cuando le hacen junto a su casa un bloque de 30 plantas o fabrican un modelo de calentador de peroles de titanio. En fin, esperemos que esto no sea predicar en el desierto.

La cesta del calzado dijo...

Buenas tardes Rafael. Como bien dices en el post, cada vez son más las instituciones públicas de distintos lugares de España que se interesan en promocionar y explotar su patrimonio histórico. Sin embargo, cada vez son menos las universidades de nuestro país con recursos para formar una nutrida generación de arqueólogos e historiadores capaz de liderar esta revolución del patrimonio. En este sentido, se puede dar la paradoja de que haya lugares que explotar, pero no profesionales que los estudien aplicando el método científico y los dirijan de forma sostenible. La amenaza de un boom turístico-cultural sin rigor académico podría cernirse sobre más de un yacimiento si la codicia de algunos de los regidores de los municipios en los que se encuentran no es controlada. Esperemos que no ocurra por el bien de todos.