5.11.23

Las Baleares hace 2.000 años


He de confesar que esta pequeña investigación casera surgió casualmente, mientras buscaba datos antropológicos acerca de los matrimonios en las Baleares de la Antigüedad. Y ello porque alguien me consultó sobre la veracidad de si los familiares varones del novio tenía derecho, y lo ejercían, a yacer con la novia antes que éste. En primer lugar, recurrí a amistades nativas o residentes en las islas con grandes conocimientos sobre su historia y arqueología, quienes me dijeron desconocer este tema; así que recurrí a las fuentes históricas a mi alcance: las obras de Antonio García y Bellido tituladas España y los españoles hace dos mil años y La España del siglo primero de nuestra era. La primera de ella basada en la Geografía de Estrabón y la segunda en Plinio. Nada encontré del tema que buscaba, pero en mis indagaciones encontré abundantes testimonios históricos sobre el archipiélago; y, como me parecieron interesantes, me decidí a plasmarlas aquí para su divulgación.

Una Geografía física y política compleja

Reconstrucción de Hispania en tiempos de Estrabón. Pág. 75

El nombre de Baleares para todo el archipiélago lo adoptaron los romanos tardíamente, pues al principio distiguían entre Baliares (Mallorca y Menorca) y Pitiusas, Pitiusa *y Ofidiusa, respectivamene Ibiza y Formentera. 

“De las islas cercanas a Iberia  las dos Pityhoússai y las dos Gymnésiai, llamadas también Baliarídes […] las Pityhoússai están más alejadas hacia alta mar, mientras las Gymnésiai yacen más al Occidente [sic], una de éstas llámase Ébousos y tiene una ciudad del mismo nombre, Ophioússa [**], que se haya cerca de ella, está desierta y es mucho menor.  De las Gymnésiai, la mayor tiene dos ciudades, Pálma [***] y Polentía, de las cuales [****] Polentía se alza en la parte oriental, mientras la otra se levanta en la occidental […] la isla menor está separada unos [doscientos] estadios de Polentía, y aunque es de una extensión mucho más reducida que la mayor, no cede a ella en lo tocante a riqueza: ambas son fértiles y poseen buenos puertos. […] Sus habitantes, gracias a las riquezas de los campos, son pacíficos, así como los que viven en Ébousos; mas la presencia entre ellos de algunos malhechores que habían hecho causa común con los piratas, comprometió a todos y fue motivo de la expedición de Métellos, en la que éste el sobrenombre de Baliarikós y fundó las dos ciudades mencionadas [Palma y Polentía].”

Notas:

*Pityoússa significa “isla de pinos”, del griego “pítys” que en griego es “pino”, del término fenicio “ibusim”.

**Ophioússa (Formentera) significa “isla de serpientes, del griego “Óphis” (serpiente).

***Pálma: Palma de Mallorca.

****Polentía: Pollensa.

Estrabón.

Detalle de las Baleares según Estrabón


Ibiza  

“Ébousos, escrito también Ébyssos, fue primera colonia fundada por los carthagineses en el área del lejano Occidente. Según textos fidedignos, su creación data del año 654 a. de J. C. La isla estaba entonces desierta o casi desierta. El primer asiento debió de fijarse en la Isla Plana (hoy soldada a la tierra firme, pero con el nombre de isla aún), inmediata  a la ciudad de Ibiza. Más tarde hubo de extenderse o trasladarse al solar de la actual ciudad. Los colonos primeros  fueron pescadores y saladores; luego debieron de llegar también industriales y  agricultores . Estos últimos hicieron  de la isla un verdadero jardín, ya alabado por los autores antiguos. La población era cosmopolita en extremo; hacia la época de Augusto, además de los púnicos, había romanos, griegos y gentes de todo el Mediterráneo, sin faltar, naturalmente, baleares e iberos. De tal población tenemos sobrados testimonios, gracias a la abundancia, en casos pródiga como pocas veces, de reliquias arqueológicas que han surgido o van emergiendo en toda la isla. De estos yacimientos, el más importante es el cementerio de la antigua Ébyssos, la llamada necrópolis del Puig d'es Molins […] Baste decir, para formarse una idea de su importancia (no igualada por ningún otro yacimiento arqueológico similar del Mediterráneo), que tal cementerio ha contenido unas 5.000 tumbas, la mayoría múltiples […] abiertas en la roca, y de las cuales han salido, durante toda la Edad Media (explotaciones árabes y cristianas) y primeros decenios de este siglo, una infinidad de objetos de toda laya pertenecientes a ricos ajuares funerarios. […] El Puig d'es Molins no es el único yacimiento de la isla [ya que] toda ella es un yacimiento casi continuo (Isla Plana, Puig d'en Valls, Cueva d'es Cuyram, con un santuario de Tanit; Purmany, antiguo Portus Magnus, Talamanca”.

* Nota 296 de la edición de Antonio García y Bellido “España y los españoles hace 2.000 años”. Páginas 175 y 177, 7ª edición, 1980.

                                                                  Figura masculina púnica procedente de Ibiza


Los honderos baleares 

“No obstante sus sentimientos pacíficos, la defensa  de su codiciada riqueza ha hecho de ellos los honderos más famosos, y dicen que esta destreza, sobre todo, desde que los phoínikes [*]  ocuparon las islas. […] Alrededor de la cabeza  llevan tres  hondas hechas de junco negro [**], de cerdas o de nervios: una larga, para los tiros largos; otra corta, para los cortos, y otra mediana, para los intermedios. Desde niños se adiestran en el manejo de la honda, no recibiendo el pan si no han acertado antes con ella; por esto, Métellos [***] cuando navegando hacia las islas se acercó a ellas, mandó tender pieles sobre la cubierta de los navíos para defenderse de los tiros de honda.” (pp. 172 y 174).

*phoínikes: es el nombre utilizado para referirse a los fenicios, pero también a los cartagineses, sus sucesores, procedentes de la colonia fenicia de Cartago en el norte de África  (actual Túnez). El sinónimo “púnico” puede referirse a ambos.

** Hechas de “melámkranis” una especie de esparto del cual se hacen las cuerdas.

***Métellos: Se refiere a Quinto Cecilio Metelo Baleárico, general romano que conquistó las Islas Baleares.

Estrábon y su “Geografía”, publicada y anotada por Antonio Gracía y Bellido.


Fauna

"La tierra de Ebusus hace huir a las serpientes, mientras que la de Colubraria  [*] las engendra; por ello es de temer para aquellos que no llevan con ellos consigo a ella tierra ebusitana. Los griegos la llamaron Ophiussa. .Ebusus no cría conejos, mientras que en las Baliares asolan las cosechas. (78, p. 139, nota 134).

En las islas Baliares hay una [especie de caracol] llamada “cavatiea”, porque no abandona los agujeros en que habita bajo la tierra; no come yerba y sus individuos viven unidos entre sí como racimos de uvas (140, p. 140, p. 157).

… Al género de las liebres pertenecen también los animales que en Hispania , “cuniculi”. Su fecundidad es extraordinaria y siembran el hambre en las islas Baliares destrozando las cosechas. Los conejillos sacados del vientre de su madre o tomados en la época de lactancia sin vaciarles el vientre, son tenidos como un bocado gratísimo. Se les llama “laurices”. (217, pp. 158-9).

Es cosa cierta que los baliaricos pidieron al divino Augustus un auxilio militar para evitar su multiplicación. La “viverra” se aprecia mucho en la caza de ellos; se la introduce en sus madrigueras, que tienen varias bocas -de aquí el nombre del animal-, y les obliga a salir afuera, donde son capturados. (217, pp. 158-9, notas 194 y 195).

...En Ebusus los “cuniculi” [mueren en la costa] y brotan de la tierra, cerca de Hispania y en las Baliares. (217, p. 159, nota 196). 

...El phalacrocorax, [cormorán]  ave peculiar de las Insulae Baliares. (133, pág.163, nota 204)

… Las Insulae Baliares crían un “porphyrion” * (pollo sultán) (135, p. 163, nota 205)

...Las grullas baliaricas tienen un penacho (122, pág. 164, nota 207)"

* Colubraria es el término latino para referirse a Ofiusa, es decir, de las serpientes, de colubra (culebra)

En esta ocasión el texto procede de Plinio, incluido en el libro La España del siglo primero de nuestra era, Editado por Antonio García y Bellido. Quinta edición, 1987, Austral.


 Productos y Flora

"los vinos: “[…] los baliaricos se comparan con los mejores de Italia” (71, p. 166, nota 213)

“[…] Los higos secos más estimados se guardan en cajas. Los mejores y más grandes se producen

en Ebusus y luego entre los marrucini” (82, p. 170, nota 224)

“[...] El trigo de las Baliares da por “modium” treinta y cinco libras de pan. (67, p. 173, nota 235)

“ [La cebolla albarrana] crece espontáneamente y en gran abundancia en las Insulae Baliares, en Ebussus y en Hispania” (94, p. 177, nota 242)"

Plinio


Bibliografía

España y los españoles hace dos mil años, de Antonio García y Bellido, publicado en Madrid por Austral en 1980 (7ª edición). Según la Geografía de Estrabón.

* La España del siglo primero de nuestra era, de Antonio García y Bellido, Madrid, Espasa Calpe, 1987 (5ª edición).



30.10.23

ANTISEMITISMO vs. ANTISIONISMO


No cabe hablar de "antisemitismo", porque tanto palestinos como israelíes son semitas. Para los ultras israelíes (su gobierno y sus apoyos) mejor hablar de "sionistas". Es decir, es mejor sustituir el término "antisemita" por el de "antisionista", porque, al fin y al cabo, el actual estado de Israel se impuso a base de terrorismo, ocupando territorios donde habitaban los palestinos. No acabo de comprender que doctos periodistas y tertulianos (todólogos), no se enteran o no se quieren enterar...

Lo deja claro el DRAE o la Biblia: https://dle.rae.es/semita#

26.9.23

LA ENSEÑANZA EN ESPAÑA (Que no la Educación)



La expresión entre paréntesis que complementa el título de esta entrada se refiere a lo que, hace ya tiempo, el profesor y filósofo José A. Marina, acuñó: "educa la tribu", es decir, toda la sociedad, desde la familia, los amigos, los vecinos, los medios de comunicación...  No es baladí esta distinción entre "Educación" y "Enseñanza", puesto que a menudo se ha tratado de cargar a los docentes con toda  esta hercúlea tarea imposible de llevar a cabo en 175 días lectivos, a razón de 6 horas diarias de lunes a viernes. Cuando el año tiene 365 días de 24 horas. Como docente que he sido, puedo contar decenas de anécdotas al respecto, una de las habituales es la de encontrar algún alumno con los pies encima del pupitre al que, tras reprenderle, responde que en su casa se lo dejan hacer... No es mi intención aburrir al lector con mis "batallitas" o las de otros docentes que las han sufrido.


Ya jubilado, y como me sigue preocupando el tema de la Enseñanza, muestro aquí los recortes de periódicos guardados al respecto durante la época en que la LOGSE estaba mostrando lo negativo de su aplicación. Todos esos artículos periodísticos los conservo y los tengo escaneados y a disposición de quien quiera verlos. Están ordenados cronológicamente. Como también la bibliografía al respecto que añado al final.


Ahí van:


  • ¿Dónde habitar? Julio Almeida. Diario CÓRDOBA, 1-4-92, pág. 38.
  • Educación nacional: una noticia escalofriante. Álvaro Pombo. El Mundo. 13-11-93.
  • Los alumnos necesitan comprensión. José Luis Cuadrado. Diario CÓRDOBA. 12-1-94, página 94 (Educación).
  • Abecedario. Francisco Umbral. El Mundo, 30-7-94.
  • “En la naturaleza no hay recompensas o castigos; hay consecuencias”. (Cita de Vachell en la portada del diario). El Mundo. 11-8-94.
  • Generaciones del 98. Mercedes Rousa. El Mundo, 10-4-98.
  • Profesores denuncian que el 90% de los niños de 12 años es analfabeto. El Mundo (Andalucía), 28-6-2000.
  • ¡El conocimiento, estúpido, no la información! Fernando Saez Vacas. El Mundo, 13-9-2000.
  • La sociedad ignara. José Antonio Gómez Marín. El Mundo, 13-9-2000.
  • Carta a María. Arturo Pérez-Reverte. Patente de Corso, semanal. 19-11-2000.
  • El nudo de la Corbata. Tres avisos, párrafo 2º. Francisco Robles. El Mundo, 29-11-2001.
  • Foro de Educación (A doña Cándida, Consejera de Educación de Andalucía). Del Nodo al Foro. El Mundo. 18-12-2001.
  • El terrorismo escolar y la “movida”. Luis Yañez López (Granada). Cartas el director. El Mundo, 9-1-2002.
  • Un manifiesto de profesores señala 10 cambios que necesita la ESO. El País, 21-1-2002. 
  • La neoenseñanza pública. Gabriel Albiac. El Mundo, 7-2-2002
  • Sectores implicados. Federico Jiménez Losantos. El Mundo, 7-2-2002.
  • Educación y televisión. Manuel Hidalgo. El Mundo, 8-2-2002
  • Huniversitarios. Federico Jiménez Losantos. El Mundo, 11-2-2002. 
  • ¡Biba la hortografia!. Antonio Burgos. El Mundo. 11-2-2002.
  • Amor se escribe sin hache. Francisco Umbral. El Mundo, 11-2-2002.
  • Escrivir vien. Belmonte (belmonte@andalunet.com). El Mundo, 11-2-2002.
  • Logse borroka. (3 avisos). Francisco Robles. El Mundo, 12-2-2002. 
  • La ortografía. Juan Bonilla. El Mundo, 12-2-2002.
  • Encuesta de opinión. El día de Córdoba. 22-3-2002. Ver resultado abajo.
  • La enseñanza de la Historia otra vez. Julio Valdeón Baruque. Sin fecha ni fuente.



BIBLIOGRAFÍA CRÍTICA CON LA LOGSE

  • SAVATER, Fernando. El valor de educar. Barcelona, Ariel. Junio 1997 (5ª edición).
  • RODRÍGUEZ TAPIA, Rafael. La enseñanza neutral. Madrid. Grupo Unisón Producciones. 1999. 
  • RUIZ PAZ, Mercedes. Los límites de la educación. Madrid. Grupo Unisón Producciones. 1999.
  • MACEDA, Pío. Nadar contra corriente. Barcelona. Laertes. 2004.
  • ORRICO, Javier. La enseñanza destruida. Huerga y Fierro. 2005 (2ª edición).


WEBGRAFÍA

- Informes PISA 



Sinceramente, pienso que el principal problema de nuestro país sigue siendo la Enseñanza, sobre todo en estos días de lucha política por el poder que orilla este primordial asunto. 




30.8.23

EL CAMINO DE SANTIAGO EN SILLA DE RUEDAS 2023



    En Ca María Elena, sellando los pasaportes


El peregrinaje comenzó a las 8 de la mañana en el Parque Fidiana. Allí me reencontré con viejas amistades y conocí a nuevas que nos acompañarían: Teresa e Isabel. Briosa la primera y muy atenta la segunda.

Antes de partir quedamos en Los  Blázquez para desayunar. Lamentablemente el bar previsto estaba cerrado, así que postergamos nuestra cita en Peraleda del Zaucejo, ya en la provincia de Badajoz. Allí nos volvimos a reunir aunque sin llegar a un acuerdo, pues los demás coches opinaron que era muy pronto para desayunar. Yo tenía cierta urgencia por razones fisiológicas y de medicamentos, así que Luis R. y yo decidimos parar. Los demás siguieron adelante, desconociendo que se internaban en la “Siberia extremeña” falta de puntos donde parar a fin de tomar el desayuno. Fue la primera disgregación de la caravana que luego se repitió más adelante por despistes varios. Ellos no encontraron lugar donde desayunar en condiciones, y nosotros -para no retrasar la marcha- seguimos adelante en el largo viaje.

Nos reencontramos en Guijuelo, dónde degustamos dos platos de jamón de la tierra y montaditos a elección personal. Lo hicimos casi de pie porque las mesas, tanto del interior como del exterior, estaban repletas. Y yo con mi bocata de jamón de pata negra que había comprado en Peraleda para el picnic de ese día y hube de dejar para los días siguientes.


Salimos de Guijuelo todos juntos pero nuevamente nos acabaríamos dispersando por confusiones, de modo que no nos volvimos a reunir hasta el punto de destino: el hotel San Paio en Lavacolla. Allí nos esperaban Fernando de Antequera y su esposa María Jesús, procedentes de Coimbra y también Juan Manuel y su pareja Pilar M.; hacía un fresco gratificante tras las calurosas jornadas anteriores en Córdoba (La Olla Omeya). El scooter alquilado ya me esperaba en el hotel. Tras la cena, y en un amplio salón reservado para nosotros, M. Morales nos obsequió con un bordón de madera y una camiseta con el logo del grupo para nuestra entrada triunfal en Santiago de Compostela prevista para el día 25 de agosto.

Llegué muy cansado y estresado por el viaje de 1.100 kms y eso que no conduje. Durante la cena dí una charla sobre la Vía Láctea, el Camino de Santiago y sus símbolos, que continué la noche siguiente.


Al día siguiente la 1ª etapa (Baamonde-Miraz) no la realicé por el madrugón del día anterior y la excitación nerviosa del viaje a pesar de que no conduje el coche. Y es que necesitaba dormir, de modo que quedé con Pilar O. que llevaba el coche de apoyo. Desayunamos a las 9 y luego nos dirigimos a Miraz, punto final de la etapa; pero con tan mala fortuna que hicimos 30 kms. -luego desandados- ya que el navegador o “Tom Tom “ (tontón) nos llevó a otro Miraz que no era el nuestro y que se encontraba en otro “Concello” lucense. Por fin nos reencontramos con el grupo en Miraz, punto final de esa primera etapa. Allí comimos los bocadillos en una zona con mesas, bancos y sombras.



En ese Miraz comenzó la jornada del día siguiente. Allí me incorporé a la ruta con el scooter. El principio fue dificultoso por las enormes piedras que “alfombraban” el suelo y luego por las pendientes de más del 6% que la máquina no podía superar, de modo que necesité ayuda numerosas veces por parte de mis amigos acompañantes. Y es que el scooter no estaba preparado para estos tramos; y eso que la ortopedia en la que lo alquilé me dijeron que era adecuado para el Camino. 


En el recorrido, tras una pronunciada cuesta en que se hubo de empujar al scooter, el grueso del grupo paramos en una granja (en Portoferro) con mesas en su patio, para aliviar nuestra sed y recargar el aparato, pues sus indicadores marcaban que la batería estaba baja. De modo que el cacharro estuvo recargándose gracias a la gentileza de sus moradores. Y allí, rodeados de perros y pasajeras vacas, asistimos a una escena que se podría calificar como "X"; una escena casi teatral, porque el gallardo gallo del corral fecundó en pocos minutos a tres gallinas ante nuestra vista y subido en una plataforma a dos metros de altura de nuestros asientos. ¡Cualquiera  se atrevía a acercarse al gallo, tal y como defendía su territorio y harén!


Gallo chulo

Luego comprobé que el problema no era la batería (tenía más de 30 kilómetros de autonomía) sino las pendientes, ya que en las zonas llanas o cuesta abajo la batería aparecía repleta. 


Finalmente pude llegar al punto final de la etapa en Sobrado dos Monxes, no sin la ayuda del taxi de apoyo adaptado debido a las insuperables pendientes; allí el amable taxista (Ángel) se ofreció a llevarnos a un mirador cercano, donde había hecho la mili en lo que fue un escueto cuartel de telecomunicaciones, ya abandonado y convertido en una plataforma para antenas. 


Vistas desde el pico campello

Se trataba del a pico Campello con buenas vistas del paisaje gallego. Y digo “llevarnos”  porque en el punto de recogida se unió Luis, que no podía seguir caminando por ampollas en los pies. Tras el picnic, ya por la tarde, visitamos el monumental monasterio cisterciense de Sobrado dos Monxes, de estilo ecléctico debido a sus avatares en el tiempo: desde el gótico inicial al barroco tardío del siglo XVIII y su reconstrucción parcial con motivo de guerras y desamortizaciones. Todo en granito simulaba un estilo herreriano, escurialense, pero recargado a la española con abundante decoración (el  horror vacui). También me dio la impresión de que intentaba rivalizar o imitar a la catedral de Santiago en la fachada de su iglesia, incluida una torre piramidal. Allí adquirí una libreta de viaje y un juego de la oca y parchís del camino.


Fachada de la iglesia del monasterio de Sobrado dos Monxes

La siguiente etapa transcurría desde Sobrado hasta Arzúa, localidad donde confluyen al menos dos caminos: el del norte (que habíamos seguido) y el francés. Fue la jornada más dura por la ola de calor que nos afectó con un recorrido mayoritariamente sin arbolado. El resultado fue que Pilar M. sufrió un golpe de calor. Por suerte acertó a pasar por allí un coche de la Guardia Civil que la auxilió y, amablemente, la trasladó al punto de encuentro (Arzúa) a pesar de que estos incidentes no formaban parte de sus labores. 


Una vez reunido el grupo en Arzúa partimos en coches hacia Melide, dónde teníamos reservada mesa en la afamada pulpería "Casa Ezequiel". Dentro, en ese local atestado, el calor era insoportable pues no disponían de aire acondicionado, innecesario en esas tierras. Eso sí, el pulpo estaba exquisito y a muy buen precio. Cuando salimos de este establecimiento nos dirigimos a una heladería cercana donde aplacamos el bochorno. De vuelta, en la terraza de nuestro hotel, siempre fresca, nos persiguió el calor. Esa noche cayó una intensa lluvia torrencial que duró poco, pero sirvió para refrescar el suelo y el ambiente. Me imagino que se trataba de una “tormenta de verano”, diaria en zonas tropicales y causada por las excesivas temperaturas en superficie que ocasionan que el aire caliente ascienda súbitamente y al llegar a capas altas de la atmósfera se enfríe y ocasione la precipitación. En efecto, el día siguiente amaneció con el cielo límpido.


El jueves 24 hicimos la etapa Arzúa-O Pedrouzo-San Paio (Lavacolla). Fue la más fácil y sombreada. En ella abundaban los peregrinos, casi una romería. Hubo un momento más mágico en un lugar en el cual una persona allí sentada tocaba un instrumento de percusión para mí desconocido, tras una mesa-altar donde había libros, sello para el pasaporte del peregrino y jalonado de carteles ad hoc. En ese tramo Mª Jesús sufrió una bajada de glucosa que le asustó, pero que afortunadamente se recuperó por la tarde en el hotel sin mayores consecuencias.


Momento musical mágico.
Puedes ver un corto vídeo con audio aquí.

La jornada final fue el viernes 25. Desde el hotel a Santiago (12 km). Le temía a las pendientes, así que cuando llegaba a zona llana aceleraba para ganar tiempo, de modo que me descolgué del grupo y de Sebastián, que iba en cabeza y me servía de protección en los tramos de carretera. El resultado fue que me equivoqué en un cruce y fui por la carretera en busca de los demás, aconsejado por un lugareño que me encontré y me indicó que ese tramo por carretera era peligroso. Así que hubo de venir Manolo Morales a rescatarme .y continuar hasta enlazar con el camino pedestre, si bien la distancia que me separaba de dicho enlace era de unos 300 metros. Los demás del grupo nos estaban esperando a la entrada de Santiago. Todos juntos a la plaza del Obradoiro pasadas las 11 horas, no sin antes el postrer obstáculo: la escalinata de bajada desde la plaza de la Inmaculada. Seguramente habría algún itinerario alternativo para salvar el desnivel, pero no estábamos para gaitas y mis acompañantes cortaron por lo sano: me bajé de la silla y ellos, cual si de trono se tratara, la bajaron entre cuatro. De modo que verdaderamente entre en la plaza a pie. Y hablando de gaitas, en esa escalera había un gaitero que me pareció tal vez irlandés, pues no llevaba el kilt típico de los escoceses y lo que interpretaba no me resultaba familiar, ni muñeira gallega ni gaita asturiana. Lástima que con la excitación del momento no me paré a hacerle una foto. Como tampoco en la plaza de Quintana al pintoresco anciano que descansaba en sus bancos corridos. Ya en el kilómetro 0 del Camino, foto de grupo y cante a cargo de Juani E. y su excelente voz.


En el kilómetro 0  (foto de M. Morales)


Luego nos dispersamos: unos a la misa del Peregrino, otros a dar una vuelta por el casco histórico y yo para desayunar y tomar la medicación el cercano Hospital de los Reyes Católicos convertido en parador nacional. Su claustro era interesante y había una puerta casi manuelina. Después recorrí el casco histórico, compré un cuponazo, me tomé una copa y adquirí regalos de azabache en la calle Azabacherías. Habíamos quedado para comer una mariscada en el restaurante Sexto II. Desde la plaza de Quintana me dirigí a su encuentro, lo pasé de largo sin darme cuenta (gracias a Google Maps!) y me planté en la plaza de Galicia, dónde -nuevamente- hubo de rescatarme Manolo Morales. Ese restaurante tiene un obstáculo de acceso: un enorme escalón a su entrada que fue superado otra vez por mis amigos, quienes subieron el scooter al que rápidamente el atento personal del restaurante buscó un lugar de aparcamiento dentro del local.


Mariscada subsiguiente


La mariscada fue abundante (no la pudimos terminar) dados los entrantes previos -empanada gallega y pimientos de Padrón- y las grandes bandejas de mejillones al vapor suplementarios. Aunque resultó  irregular: percebes, y porras de pata de cangrejo un tanto resecos. El resto, buey de mar, centollo, cigalas y langostinos muy bien. Y de postre una variedad de pastelillos para todos los gustos. Salimos saciados y contentos. Después Pilar Ortega me acompañó para devolver la máquina a la ortopedia, en la que hice saber a la dependienta que ese aparato no estaba preparado para el Camino. Ella se disculpó diciendo que el técnico lo había recomendado por ser el más potente disponible. Desde allí regresamos al hotel en taxi.



En la noche despedidas tras un arroz exquisito, adobado con alguna especia que algunos sospechamos se trataba de romero, como después nos confirmó la joven y simpática camarera, sin desvelarnos completamente el secreto de la receta que algún comensal atribuyó a la alcachofa que no todos catamos.


En la mañana siguiente, durante el desayuno conjunto a las 8 de la mañana, recibí mi Compostela y el Pasaporte del peregrino. Luego, tras efusivos y sinceros abrazos, nos despedimos hasta otra; cada cual partió a la hora que le pareció oportuna. Luis y yo salimos los últimos (sobre las 9) aunque dejando allí a Mª José (a quien ya conocía por nuestro común viaje a Cuba en 2004) que tenía su vuelo de retorno unas horas más tarde.


Luis decidió volver por Madrid y no por la Vía de la Plata por la que vinimos. Ciertamente hubimos de pagar un peaje en la autopista, pero no nos importaba. Durante el trayecto yo sesteé un poco. Luego Luis hizo dos paradas para sestear y así descansar él también. Paramos a la entrada de Tordesillas para comer en un restaurante llamado “El Cruce” con servicio muy rápido y buen condumio a base de carne. Llegamos a Córdoba sobre las 21:15, tras 12 horas de viaje y 1,100 kilómetros.


MAS FOTOS : AQUÍ



12.8.23

DIARIOS (1956-1985) de Jaime Gil de Biedma




A fines de mayo de 2023 un amigo me regaló este libro para mi solaz durante el viaje y estancia común en las termas romanas de Alange. Aunque yo llevaba lectura, lo comencé inmediatamente en nuestro largo viaje en tren, primero a Sevilla (AVE) y luego un medio distancia a Mérida. Me entusiasmé inmediatamente con su lectura, aunque sus 667 páginas me han tenido ocupado hasta ayer, si bien lo ido intercalando con otras lecturas, especialmente sobre el Camino de Santiago en vistas de mi próximo peregrinaje allí.

No había leído nada de Gil de Biedma, solo tenía referencias de su vida y obra y luego vi una película sobre él titulada El cónsul de Sodoma interpretada por Jordi Mollá.

La obra es desigual en contenidos y extensión. La primera parte, titulada Retrato del artista en 1956 ocupa 266 páginas y tal vez fue publicada suelta en 1976 con el título de Diario del artista seriamente enfermo, en la que narra su experiencia en Filipinas como abogado y ejecutivo de la Compañía General de Tabacos de Filipinas.

La siguiente parte se titula Diario de Moralidades y abarca desde 1959 hasta 1965. Tras un paréntesis casi 13 años, vuelve a retomarlo en 1978 y da un salto hasta 1985, cuando lo finaliza, posiblemente por su diagnóstico de sida.


Índice de la obra

La edición cuenta con un prólogo de Andreu Jaume, una cronología, bibliografía del autor y un completísimo índice onomástico que va desde los clásicos, pasando por la generación del 27 y la del 50 a la que pertenece junto a otros “compañeros de viaje” como Carlos Barral, los Goytisolo y otros, que además fueron activistas políticos contra el franquismo. En el centro del volumen hay una colección de fotografías en las que aparece solo o en compañía de familia, conocidos y amigos, desde 1953 hasta 1964.

Y lo de desigual, también viene a cuento no solo por la extensión de las anotaciones de anuales, sino por su contenido. Unas veces personal, íntimo, y otras sobre la mecánica para elaborar y pulir sus poemas antes de intentar publicarlos, con muchos ejemplos(1960, 61, 62 y 1963), cosa muy útil para aprendices de poetas sin rima. En 1964 sigue con este tema pero incluye sus relaciones sociales (principalmente literarias), que continúa en 1965.

Un pequeño problema es que abundan expresiones en otros idiomas que a veces no están traducidas a pie de página y que parecen guiños a sus amigos o posibles lectores todos miembros de la gauche divine barcelonesa o española.




4.6.23

EN EL VALLE DE LA OSA (autobiografía 18)



 Diana en el porche de la casa

El título alude al nombre del valle donde está situada Constantina. Antes de comenzar las clases, en septiembre de 1990, me advirtieron de que su instituto era severo en la disciplina; se trataba de un centro pequeño (unos 250 alumnos) muy respetuosos. Pero también me habían dicho que esa localidad se había refugiado temporalmente el nazi belga León Degrelle y había dejado su huella ideológica en círculos cércanos y una parte significativa de la población. Pero también acudía alumnado de otras localidades cercanas como El Pedroso, San Nicolás del Puerto o Las Navas de la Concepción

En fin, yo llegué muy serio; tanto que diciembre era tradición allí que los alumnos celebraban su tradicional fiesta de los "Premios Naranja y Limón", en la que premiaban a quienes ellos consideraban el mejor y peor profesor del año. Pero también otros “premios” materiales a otros miembros del claustro de profesores, con cierto gracejo aunque mordaces. Y hete que me llamaron al escenario -era en el salón de actos- del instituto y me entregaron un collage con unos labios sonrientes y la leyenda “Sonría, es gratis” (a ver si lo encuentro). Y no fui el peor parado, pues a la profesora de Educación Física le regalaron unas zapatillas de
deporte nuevas, pues acudía a las clases de su disciplina en zapatos de tacón… y este “regalo”, que la profesora -lógicamente- no recogió, no fue el peor de los adjudicados ese día. De modo que, desde ese momento mi faz cambió en clase y siempre me mostré con una sonrisa sincera.

El alumnado que tuve en 2º de Bachillerato era tan bueno y brillante que acogieron con muy buena disposición la idea que les ofrecí de darles clases extra algunas tardes, ya que el temario era muy extenso -se trataba de la Historia del Arte- y yo siempre he sido una tortuga en eso de avanzar en los contenidos de las programaciones didácticas.


31.5.23

¡ A Constantina! Autobiografía 17



Constantina desde su castillo


Visité el Centro para registrarme y buscar vivienda, porque aunque la localidad dista solo 105 km. de Córdoba, los últimos 30 (desde Lora del Río) eran una carretera de sierra: estrecha y sinuosa, con muchas curvas y poca visibilidad, especialmente en días de lluvia o frecuente niebla.  Una hora y treinta minutos de ida y otros tantos de vuelta, y no estaba dispuesto a dedicar 3 horas diarias de mi vida al transporte, caro y peligroso. Y es que, salvo mis años de juventud, el coche me gustaba poco. Y menos después de los dos únicos accidentes de tráfico que he tenido y que ambos fueron, precisamente, en rectas entre Palma del Río y Lora. En el primero atropellando a un galgo que surgió de la nada cruzando a toda velocidad la carretera… Lamentablemente en ese momento me estaba adelantando un coche por la izquierda; así que al animal le dio tiempo a cruzar delante de mi coche pero, al encontrarse al otro, dio la vuelta y me lo llevé por delante inevitablemente, pues un volantazo podría haber sido mortal para mí y tal vez para el otro coche. El animal quedó tumbado en la calzada -lo vi por el retrovisor- y mi pena fue enorme. Al llegar al instituto comprobé los daños: toda la delantera de mi coche (capó, faros e intermitentes) había quedado destrozada; era lo de menos pues se podía reparar… no así la vida del pobre perro.


El otro accidente tuvo lugar cuando intenté adelantar a un tractor que viró hacia la izquierda para entrar en un carril de tierra de una casa de campo. Las consecuencias fueron pocas, excepto el susto y poco más, pues frené a tiempo. El conductor del tractor juró que había encendido el intermitente -cosa que dudo- pero es que, además, sus intermitentes iban llenos de barro, como corroboró mi acompañante, una maestra cordobesa de Villaviciosa de Córdoba a la que traía de vuelta a Córdoba los fines de semana.


Por suerte en Constantina encontré alojamiento pronto; se trataba de una casa con jardín, casi a las afueras del pueblo y a cinco minutos del instituto. En ese trayecto me encontraba con alumnos que me saludaban cortésmente.