3.4.07

París


Nuevamente París; esta vez de excursión.

Decía Carlos Cano en una copla:

"La Habana es Cádiz con más negritos.
Cádiz, La Habana con más salero
".

Bien podría decir yo que París es La Habana restaurada, o que La Habana es París bloqueada (con desconchones y mejor gente). Y no lo digo solo por nuestros queridos Olga y Reinaldo.

Y sin embargo, la ciudad mantiene su magia y me sigue fascinando; aún en contra de mis apreciados amigos francófobos; en cuyo favor hay que decir que esta vez me ha parecido un tanto rutinaria y cambiada (muchos mendigos y policías...).

Hasta que, repasando las fotos, he recuperado aquella agradable sencación de otras veces (La plaza de los Vosgos, el barrio judío, el Barrio Latino, Clichy, Montmartre...).

Es una ciudad para pasearla; para vivirla en sus calles y bulevares. De la que otras veces también he disfrutado de la mano de Proust, Miller o Cortázar.

A pesar de la tensión y la rutina de esta vez, dos cosas debo destacar: la agradable sorpresa del Hard Rock Café y la colección de manzanos en flor en los Jardines de Luxemburgo.

¿Siempre nos quedará París?.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Todavía se sigue pensando/soñando/imaginando en un París lleno de novelistas, de poetas, de músicos, de filósofos, de revolucionesrios, que nos iremos encontrando en cualquier callejuela o el cualquier esquina, y que en cada buhardilla habita un pintor pendiente de ser descubierto para la posteridad?
¿Qué pensará de París el hijo de un emigrante argelino, que no se encuentra integrado, que está en paro, que vive marginado en un barrio (porque en París también hay barrios marginales)?

Rafael Jiménez dijo...

Interesante la visión social que propones, pero sin duda esa es otra historia.

En cuanto a los sueños, espero al menos que no nos quiten ese espacio de libertad.

Salud.-

Diana entrebrochasypaletas dijo...

Ojalá que siempre nos quede París porque junto con Italis son de los lugares que tengo que visitar algún día :***